El actor Julio Chávez, que protagonizará la segunda temporada de El Tigre Verón, se refirió a cómo vive la cuarentena por el Covid-19. “Acatamos una forma de vida en la cual se dice que somos libres, pero no lo somos. Me siento una hormiga a la cual se le ha roto el circuito, me estoy desorientando. Las hormigas van todas derechitas y de repente les cambian el camino”, reflexionó.
En diálogo con La Once Diez/Radio de la Ciudad analizó que “esto es muy fuerte, repentino, rotundo, mundial. Asusta, nos aleja del otro“. Admitió entonces que “tengo instalada en el cuerpo una cultura determinada y cuando ves que tus hábitos y lenguajes tienen que cambiar de un día para el otro es muy fuerte. El afuera hoy no es lo que estamos acostumbrados“.
Asimismo, confesó que “lo que más me cuesta es no tener un espacio afuera donde poder desarrollar mi vida. Esa restricción para mí es muy fuerte. Tengo mi estudio vacío. Me obligan a adaptarme, pero me cuesta no poder proyectar”.
“Me impresiona la situación general, salir a dar una vuelta manzana, caminar por la calle, los cuerpos alejándose del otro, el miedo al otro y a uno mismo”, manifestó.
SEGUNDA TEMPORADA DE “EL TIGRE VERÓN”
Por otra parte se refirió a la segunda temporada de El Tigre Verón y adelantó varios detalles de lo que se verá en la segunda entrega de la serie que lo puso en la piel de un líder sindical. “La cuarentena nos agarró a ocho jornadas de terminar El Tigre Verón, de los ocho capítulos hay hasta seis terminados”, precisó. Y reveló que “es mejor que la primer temporada. Tiene un primer capítulo espectacular. El Tigre sale de la prisión y su misión de recuperar su lugar en el sindicato. Es más padrazo que nunca, y además va a ser abuelo, abuelazo”.
“Va a tener un contrincante estupendo. Será Pipo Luque, a quien quiero mucho y con quien me gusta trabajar”, expresó.