Entrenar en los parques y plazas de la Ciudad ya es una práctica que se ha extendido a todos los barrios porteños. De las múltiples variantes surge una nueva tendencia, la que construyen con ejercicios y piruetas los aficionados y atletas de calistenia. Ante el furor por la disciplina, el Gobierno de la Ciudad creó nuevas instalaciones para esta práctica deportiva e inauguró el circuito de calistenia más grande del país en Palermo.
El espacio está ubicado en la Plaza República de Haití. Posee cuatro equipamientos diferenciados para realizar ejercicio. Sobre una superficie de 458 metros cuadrados, el circuito está dotado de barras, paralelas, pasamanos, anillas y bancos de abdomen, sobre un solado antigolpes para una práctica segura. Las estructuras son de acero recubierto con pintura microtexturada electrostática en polvo, y las abrazaderas están fabricadas en aluminio y son regulables en altura. Cada par de abrazaderas soporta hasta 400 kilos de peso.
Profesores y usuarios de este espacio indican que en torno a medio centenar de practicantes eligen este nuevo circuito rodeado de naturaleza en los bosques de Palermo para ejercitarse y mejorar en sus entrenamientos. Brazos extendidos, vueltas en el aire, elevaciones, giros extraordinarios y sorprendentes balanceos son la expresión de los cuerpos en movimiento, que dibujan líneas que desaparecen a la velocidad de las piruetas.
“El diseño de este parque sigue los lineamientos de diseños europeos y estéticamente es muy bonito. Está compuesto básicamente de cuatro módulos y permite que aproximadamente 50 atletas o practicantes puedan estar entrenando a la vez”, destaca Pablo Urruty, presidente de la Federación Internacional de Street Workout y Calistenia (International Calisthenics and Street Workout Federation), y miembro de la Fundación Calistenia Argentina, que agrupa a miles de deportistas en el país.
Respecto de las características de la nueva estación de calistenia, Urruty comentó: “Está ubicado en un lugar estratégico dentro de lo que es la Ciudad, donde la gente se reúne para entrenar distintos deportes. Debido al diseño que tiene, se puede decir que es transversal a muchísimos deportes en cuanto a su funcionalidad no solo para calistenia sino para cualquier otro deporte que tenga como ejercicios básicos dominadas, fondos, abdominales en bancos o barra, estiramientos, entre otros. Muchos usuarios eligen este parque para entrenar y para el acondicionamiento general del cuerpo mediante ejercicios básicos y estáticos, que son figuras acrobáticas en isométrico, como la ‘bandera humana’, la ‘plancha’ o las verticales”, precisa.
En la jerga deportiva, cada movimiento o pirueta tiene un nombre, aunque al conjunto de balanceos, saltos, giros y pruebas propiamente acrobáticas se enmarca dentro de la categoría de “dinámicos”, mientras que los de fuerza en isometría se agrupan bajo la clasificación de “estáticos”.
Carlos Saona es campeón sudamericano de calistenia y entrena tres veces a la semana en República de Haití. A sus 23 años, este vecino de Villa del Parque destaca las ventajas de entrenar en un espacio abierto. “No te sofocás como en un espacio cerrado, te sentís mentalmente libre”, menciona. Su decisión de utilizar estas instalaciones se debe al amplio espacio de barras, por lo que es raro que alguien se quede sin entrenar. También se destaca la buena separación, piso de goma para hacer ejercicios acostado y mucha estabilidad”.
Además, considera que el espacio “incentiva a que las personas en general hagan deporte”. Él entrena hace siete años y sigue una rutina que suelen aplicar gran parte de los practicantes, consistente en “una entrada en calor, un trabajo de empuje, dos de tracción, tres ejercicios complementarios y la vuelta a la calma”.
George es otro aficionado al deporte que también entrena en Palermo, aunque vive en Colegiales. Sobre su experiencia, comparte: “Me gusta ir ahí porque es una plaza nueva y es un lugar bastante tranquilo a nivel concentración de gente y circulación. Y, al ser un puesto cien por ciento de calistenia, va gente especialmente a hacer eso. Me gusta porque interactuás con otros que comparten determinados ejercicios”.
En su caso, cuenta que si bien no entrena de forma profesional, practica la disciplina desde hace unos seis años. “Hoy entreno por mi cuenta y estas barras están pensadas especialmente para gente que ya practica calistenia con alturas, medidas, grosores de barras que responden a los estándares y que están bien pensadas. También destaco la comodidad del piso, que no haya barro, que podés ir incluso un día que llueve, estaciono mi auto ahí y puedo entrenar normalmente”.
“Entrenar en el parque es beneficioso para la salud y la mente, ya que nos fortalece. Además, absorbemos la vitamina D que nos brinda el sol. El parque forma a atletas profesionales que luego compiten y representan el país nacional e internacionalmente”, recalca Leandro Lionel Drago, integrante del equipo de calistenia EPDRAGO, profesor y miembro de la Fundación Calistenia Argentina.
En relación a los beneficios para la salud que presenta la disciplina, Drago destaca: “Los estudios científicos dicen que solo el hecho de estar colgado en la barra ya es beneficioso para nuestro bienestar general, para estirar la zona escapular, la espalda y mejorar la mala postura de aquellos que trabajan sentados en la oficina durante horas”.
El nuevo circuito de Palermo no solo es utilizado por practicantes de calistenia, allí también se realizan prácticas de yoga, estiramientos, crossfit y running, para el fortalecimiento muscular y para ejercitar los niveles de resistencia.