Por DANIEL RODEGHIERO / Director de Sección Ciudad @danielrodeghiero
Palermo es uno de los barrios más grandes y diversos de la Ciudad de Buenos Aires. Su amplitud geográfica se refleja también en la variedad de propuestas que ofrece: desde parques y espacios verdes hasta museos, centros culturales, gastronomía de primer nivel y una intensa vida nocturna.
El Parque Tres de Febrero, más conocido como los Bosques de Palermo, es el pulmón verde del barrio y uno de los sitios preferidos de vecinos y turistas. Con sus lagos, el Rosedal y el Planetario, resulta ideal para caminar, andar en bicicleta, hacer picnic o simplemente relajarse bajo los árboles.
A pocos metros, el Jardín Botánico Carlos Thays y el Jardín Japonés ofrecen propuestas distintas: uno es un espacio histórico de flora nativa y exótica, mientras que el otro es un rincón oriental con estanques y puentes que invitan a la contemplación.
Palermo también es un polo cultural. El Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA) reúne una de las colecciones más destacadas de la región, con obras de Frida Kahlo, Diego Rivera, Tarsila do Amaral y Antonio Berni.
Además, galerías independientes y centros culturales como La Casa del Árbol acercan propuestas alternativas de música, literatura y artes escénicas.
En sus distintas áreas conviven estilos muy diversos. Palermo Soho se caracteriza por bares y restaurantes con cocina de autor, cervecerías artesanales y tiendas de diseño. Por su parte, Palermo Hollywood es conocido por sus productoras audiovisuales y una vida nocturna vibrante, con bares de coctelería, discotecas y restaurantes de moda.
Los patios gastronómicos, como el Mercado Soho, se suman a la oferta, convirtiendo a Palermo en uno de los puntos más buscados por quienes quieren descubrir nuevas tendencias culinarias.
El barrio es también un epicentro de diseño independiente. Sus calles están repletas de locales de indumentaria, decoración y arte urbano, con murales que convierten cada recorrido en una galería a cielo abierto.
Palermo combina lo tradicional con lo moderno. Sus casas antiguas conviven con edificios de vanguardia, y su propuesta cultural, gastronómica y recreativa lo posiciona como uno de los barrios más atractivos de Buenos Aires.
Ya sea para un paseo al aire libre, una salida cultural, una cena gourmet o una noche de diversión, Palermo siempre tiene algo para ofrecer.