La Policía de la Ciudad detuvo a tres hombres de 20, 23 y 30 años que habían robado, en distintos hechos, piezas de bronce en los barrios de Retiro, Recoleta y Villa Real.
El primero de ellos sucedió en Recoleta, en la avenida Santa Fe al 2200, en el ingreso de una papelería. Personal policial fue alertado por la presencia de dos sospechosos en el lugar que habían robado una pieza de bronce y se habían dado a la fuga.
Gracias a las cámaras del Centro de Monitoreo Urbano (CMU), que aportaron las descripciones fisionómicas de los sujetos, los policías lograron visualizarlos y detenerlos en la intersección de las calles Ayacucho y Arenales. La Justicia dispuso la detención y el traslado del autor del hecho como así también el secuestro de la pieza robada.
En el caso de Retiro, efectivos policiales fueron desplazados por una denuncia al 911 sobre un hombre que había intentado robar una placa de bronce en un edificio de la calle Basavilbaso al 1200. Así se logró dar con el sospechoso en la avenida Del Libertador al 100. Allí también el juez Osvaldo Rappa solicitó la detención del imputado por “tentativa de robo”.
Por otro lado, oficiales policiales que se encontraban recorriendo el barrio de Villa Real, mientras circulaban por la calle Tinogasta en dirección a Gallardo, observaron a un sujeto que caminaba con una bolsa blanca. Este al percatarse de la presencia del personal policial la arrojó y salió corriendo. Rápidamente los policías lo persiguieron y lo atraparon a los pocos metros. Al revisar la bolsa que había descartado, encontraron un destornillador verde, un cuchillo tipo Tramontina, un picaporte y tres números de bronce. Las autoridades rastrillaron la zona hasta que descubrieron a qué casa pertenecía el faltante de los números. La jueza Vanesa Peluffo ordenó la detención y el traslado del imputado como así también el secuestro de todos los objetos que se encontraron.
Finalmente, efectivos que recorrían la zona de Recoleta fueron alertados por tres individuos que se encontraban forzando la entrada de blindex de un edificio ubicado en la calle Uruguay al 1100. Personal policial comenzó a recorrer las cercanías del lugar del hecho hasta que divisaron a dos de los implicados caminando por la calle Arenales al 1300 y rápidamente los detuvieron.
Momentos después se hizo presente la damnificada quien, no sólo reconoció a los delincuentes, sino que también facilitó las vistas fílmicas de las cámaras de ingreso del inmueble. En este hecho, el juez Osvaldo Rappa dispuso la detención de los imputados y el secuestro del objeto con el que intentaron cometer el ilícito.