El proyecto de dicha línea, la primera del subte de la Ciudad, comenzó en 1898. Su inauguración fue recién para diciembre de 1913.
Para 1913, eran tiempos en los que aumentaban los pasajeros que utilizaban el tranvía, unía Plaza de Mayo con la Plaza 11 de Septiembre (actualmente Plaza Miserere).
fue el primer día que se habilitó al público. Viajaron unas 170 mil personas en la línea A.
La obra comenzó en 1911. Tardó poco más de dos años en construirse. Se trató de la primera red de subterráneos de Latinoamérica..
A nivel mundial, el subterráneo ya funcionaba en ciudades como Londres, Atenas, Berlín, Boston y Nueva York.
Contaba con seis ventanales por lateral, provistos de cortinillas para proteger a los pasajeros de la luz solar durante los recorridos a nivel.
Su interior estaba completamente revestido en madera. Lo iluminaban 38 lámparas incandescentes, dispuestas en artefactos luminosos construidos en bronce al estaño y tallados con formas de hojas de acanto.
Estaban distribuidos en cuatro juegos enfrentados en la parte central del salón, colocados de a dos por lateral.