El Italpark y el Interama, ubicados en la Ciudad de Buenos Aires, fueron parques que formaron parte de la vida cotidiana y social, entre 1960 y 2000.
Son íconos de una época: aparecieron en películas y telenovelas y hoy siguen viviendo en la memoria de aquellos que solían frecuentarlos.
ITALPARK
En Avenida Libertador y Callao, donde hoy está el Parque Thays, se fundó el Italpark. Su nombre se debe a la nacionalidad italiana, tanto de sus fundadores, la familia Zanon, como de sus atracciones. 
El espacio funcionó desde 1960, durante treinta años, encontrando en los 80 su punto de máxima popularidad. El terreno, que medía 45 mil metros cuadrados, contaba con 35 juegos y otras tantas atracciones.
La crisis que atravesó Argentina durante la década de los 90, no le fue ajena, ya que a partir de ese momento el mantenimiento de las instalaciones comenzó a decaer. Como consecuencia de lo mencionado, el 29 de julio de 1990 una adolescente de 15 años falleció en un accidente dentro del Matter Horn, uno de los juegos del parque. Este hecho desencadenó la clausura del lugar.
La intención original era una reapertura rápida del Italpark, luego de inspecciones y reparaciones, pero eso nunca sucedió. Cuatro meses después, Carlos Grosso, el intendente de ese momento, lo clausuró definitivamente.
INTERAMA
Ubicado en Villa Soldati, abrió sus puertas en 1982. Al año siguiente, con el retorno de la democracia, se lo rebautizó Parque de la Ciudad y pasó a estar en manos de la Municipalidad. El plano original, que nunca se terminó, fue realizado por tres estudios arquitectónicos de Estados Unidos que habían trabajado en Disney. Allí se inauguró un torre de 208 metros que es el punto más alto de la Ciudad.
Osvaldo Cacciatore fue quien ideó el ambicioso proyecto: un zoológico, hoteles cinco estrellas y parque de diversiones. Finalmente, el Interama contó con 60 juegos y cinco sectores Latino, Carnaval, Futuro, Fantasía e Internacional.
En 2001, con la difícil situación económica del país, el parque perdió popularidad. Sin embargo, su final llegó cuando un operario murió mientras arreglaba uno de los juegos. Esto produjo la clausura de algunas de las atracciones y el posterior cierre preventivo del lugar. Durante 2007, se reabrieron 14 juegos pero no duró demasiado.
Hoy, es se convirtió en un espacio verde de la Ciudad, donde están emplazados la Villa Olímpica, el Hospital Cecilia Grierson y La Torre Espacial, la única atracción del parque que sigue en pie y puede visitarse. Desde su antena, emplazada a 228 metros de altura, se transmiten las señales de El Observador y Canal 26.
En el presente, fanáticos de ambos parques los recuerdan con mucho cariño, como parte de su juventud: comparten experiencias en grupos de Facebook, llevan tatuajes alusivos a estos sitios y hasta sueñan con su restauración.