Un buen cuidado de la piel, mediante la limpieza suave y la protección solar, son claves hoy en día para mantener la piel sana y radiante.
Elegir un estilo de vida saludable y utilizar productos de higiene adecuados pueden ayudar a retrasar el envejecimiento natural de la piel. Sin embargo, aunque la mayoría de la gente no se da cuenta, hay productos para el cuidado de la piel de uso diario que pueden ser importantes contribuyentes de ingredientes nocivos, toxinas y productos químicos.
Y es que la mayoría de los productos de belleza comprados en tiendas y producidos comercialmente vienen repletos de colores artificiales, fragancias, conservantes y estabilizadores que pueden ser fácilmente absorbidos por los poros de la piel, causando potencialmente una serie de efectos negativos para la salud a largo plazo.
La buena noticia es que todavía hay muchas formas naturales de hacer que tu piel -e incluso tu pelo, tus dientes o tus uñas- luzcan lo mejor posible sin necesidad de comprar productos comerciales caros y dañinos. Las damas de compañía en Sucre lo saben muy bien al igual que en la cultura femenina nipona, y por eso utilizan productos naturales para el cuidado de la piel que te contamos a continuación.
LOS MEJORES INGREDIENTES PARA EL CUIDADO NATURAL DE LA PIEL
Hoy en día hay más productos naturales para el cuidado de la piel que nunca, y su larga lista de beneficios, más allá de una piel bonita, podría sorprenderte. Cuando usas productos naturales como estos con regularidad, no sólo estás embelleciendo tu piel, sino que también estás absorbiendo antioxidantes, mejorando la resistencia de tu piel a los rayos UV y estimulando tu sistema inmunológico.
1. El aceite de coco
Uno de los ingredientes para la piel (y para la alimentación) más versátiles que existen, los beneficios del aceite de coco para la piel incluyen: fortalecer el tejido epidérmico subyacente, eliminar las células muertas de la piel, protegernos de las quemaduras solares y contener propiedades antibacterianas, antivirales, antifúngicas y antioxidantes.
2. Aceite del árbol del té
El árbol del té (Melaleuca alternifolia) se ha utilizado durante cientos de años en Australia para combatir los brotes, el enrojecimiento y la inflamación de la piel. Mientras que muchas personas reaccionan con dureza a los ingredientes típicos para el tratamiento del acné, como el ácido, el aceite del árbol del té suele ser bien tolerado y tiene pocos o ningún efecto secundario desagradable cuando se combina con un aceite portador y se aplica directamente sobre la piel.
3. Aguacate
Fruto graso ultrahidratante, entre los beneficios del aguacate se encuentra su contenido en vitaminas A, D y E, capaces de penetrar en la piel. Ayuda a calmar la piel quemada por el sol, puede impulsar la producción de colágeno y tratar las manchas de la edad. También funciona para reducir la inflamación de la piel cuando se aplica tópicamente y puede hacer lo mismo internamente cuando se come. Prepara una mascarilla de aguacate casera, como hacen las scorts independientes en Buenos Aires con aguacate fresco combinado con aceites esenciales, miel o un aceite portador para reponer la hidratación y dejar la piel con una sensación de rocío.
4. Miel cruda
La miel cruda es una de las mejores fuentes naturales de nutrientes, enzimas, vitaminas y ácidos que potencian la piel. Los beneficios de la miel cruda incluyen la reducción de los brotes, la provisión de propiedades hidratantes, la presencia de cualidades antisépticas, el fomento de la curación de heridas, la lucha contra las alergias o las erupciones, y la ayuda para reducir las cicatrices.
5. Aceite de argán
Originario de Marruecos y utilizado allí durante generaciones, el aceite de argán es tan curativo porque es rico en vitamina A y vitamina E, varios antioxidantes, ácidos grasos omega-6 y ácido linoleico. El argán no sólo es estupendo para hidratar suavemente la piel, sino que también potencia el brillo y la salud del cabello.