La Policía de la Ciudad secuestró autopartes adulteradas del interior de dos talleres mecánicos que infringían la Ley de Desarmaderos en los barrios de Villa Soldati y Palermo.
Personal policial logró desarticular dos talleres clandestinos donde se encontraron gran cantidad de autopartes adulteradas.
En el primero de ellos, efectivos que se encontraba recorriendo la zona de la Comuna 8, observaron, en la intersección de la avenida Escalada y Aquino, un Fiat Duna color rojo estacionado sobre la avenida que contaba con pedido de secuestro activo.
De inmediato, los oficiales detuvieron su marcha y descubrieron que sobre la calle Aquino funcionaba un taller mecánico. Se entrevistaron con el propietario del lugar, un hombre de nacionalidad boliviana quien, al ser consultado por el Fiat Duna, refirió que era de un cliente y que el pedido de secuestro había sido levantado, presentando toda la documentación pertinente.
Los efectivos recorrieron el local y encontraron cuatro motores con la numeración adulterada, seis cajas de velocidad y 13 radiadores. Todos esos elementos carecían de las calcomanías correspondientes al RUDAC (Registro Único de Desarmaderos y Actividades Conexas) lo que exhibía una infracción a la Ley de Desarmaderos.
Tras dar aviso al fiscal Oscar Díaz, este ordenó notificar al responsable del comercio, secuestrar la totalidad de las autopartes en infracción y trasladarlas a la Playa Judicial y clausurar el establecimiento.
Por su parte, la Policía de la Ciudad, con la intervención del fiscal Federico Tropea, procedió a inspeccionar otro taller ubicado en Darregueira al 2100, en Palermo.
Al momento del procedimiento, el dueño del lugar, un hombre de 42 años, se encontraba en el mismo. Una vez que el personal policial corroboró el ilícito, fue notificado por infringir la Ley de Desarmaderos.
Durante este procedimiento se secuestró un motor de Ford Focus que presentaba irregularidades en su numeración, ocho cubiertas, la tapa de un baúl, tres radiadores, un alternador, un motor de arranque, un servo de freno, un faro trasero, un equipo de aire acondicionado y una computadora de mando central de vehículos (ECU). Se trata de todas autopartes de dudosa procedencia que carecían de los stickers de RUDAC.
Al finalizar, se le dio aviso al Magistrado interventor, que ordenó secuestrar los elementos probatorios y trasladarlos a la Playa Judicial como así también incautar los celulares del implicado.
Cabe destacar que la génesis de esta investigación tuvo lugar mediante tareas de ciberpatrullaje. Se constató la publicación de venta de autopartes y piezas de motores en la página Marketplace y las mismas estaban almacenadas en el taller mencionado.