Por JULIO ZAMORA / Intendente de Tigre
Creo necesario hacer algunas aclaraciones sobre un tema al que considero artificialmente controvertido, como es el de la instalación de una Alcaidía del Servicio Penitenciario provincial en nuestro distrito.
En la actualidad, se encuentran alojados en las comisarías de Tigre más de un centenar de detenidos, al cuidado exclusivo del personal policial, que debe ocuparse de su custodia, alimentación, traslados a sede judicial y otras tareas relacionadas.
Este personal debería estar afectado a las tareas propias para las que fue capacitado: patrullaje, prevención e investigación de delitos, así como a la seguridad integral de las y los vecinos del Partido.
Además, en un enfoque no menos importante, las comisarías no cuentan con el espacio físico para alojar a esta cantidad de detenidos, lo cual genera un tema de hacinamiento absolutamente grave y de solución urgente, tanto por la integridad de los internos como por la seguridad de todos nuestros vecinos y vecinas, ante la posibilidad de un intento de fuga o motín.
Para ejemplificar, el detalle de alojados en las 6 comisarías del distrito al día 17/3/23 es de un total de 105 personas. Las plazas disponibles para detenciones en dichas comisarías ascienden a 46 lugares.
La construcción de la Alcaidía permitirá trasladar, en un plazo no mayor a las 48 horas a todos los detenidos de las comisarías y reafectar así al personal policial, recursos, móviles y presupuesto a tareas de seguridad ciudadana.
Este plan da cumplimiento a fallos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y de la Suprema Corte de la provincia, que determinan que no haya más detenidos alojados en comisarías. Por ello el gobierno de la Provincia de Buenos Aires diseñó e implementó el Plan de Infraestructura Penitenciaria, que prevé la construcción de 16 Alcaidías en diferentes partidos del Conurbano y permitirá reasignar a la seguridad pública tanto a agentes de policía como recursos que hasta ahora se hallaban afectados a la custodia de estos detenidos.
Este operativo del gobierno de la Provincia de Buenos Aires va a realizarse a la brevedad en Almirante Brown y Berazategui, donde las Alcaidías ya están terminadas y a punto de entrar en funcionamiento.
Cada Alcaidía será gestionada exclusivamente por personal del Servicio Penitenciario, con recursos del Ministerio de Justicia de la Provincia. Serán dirigidas por un civil, obligatoriamente abogado y que será quien interactúe con el área de seguridad de cada municipio.
Este plan requirió para su cumplimiento que la Legislatura Bonaerense aprobara la expropiación de los terrenos. La iniciativa fue votada afirmativamente por unanimidad.
Por estructura y funcionamiento, las alcaldías semejan una comisaría de mayores dimensiones y son sustancialmente diferentes de una unidad penitenciaria común. Cada una ocupará un promedio de 1 o 2 hectáreas con 4000 m2 construidos, podrán alojar hasta 300 detenidos y su estructura edilicia será armónica con el entorno.
Se trata de un lugar transitorio de detención, hasta el dictado de la prisión preventiva, cuando el detenido será remitido a una prisión regular, tal como está expresado y regulado en el Artículo 12 del decreto 2386/10, tareas que hoy cumplen las comisarías de cada municipio.
En el caso de Tigre, el área de influencia directa donde se instalará el proyecto presentado, ya ha sido paulatinamente antropizado producto de la instalación de la Planta de AySA, la vía ferroviaria en desuso (conocida como “vía muerta”) y el polderizado sobre ruta 26. El proyecto a desarrollar ocupa un 18% de la totalidad de la parcela, el resto mantendrá las condiciones actuales sin intervención. Desde el municipio se velará por el cumplimiento de las medidas de mitigación establecidas en el Estudio de Impacto Ambiental elaborado por la Universidad Nacional de La Plata. Asimismo, se tomarán los recaudos necesarios y se solicitarán los estudios que se consideren pertinentes con el fin de evitar y/o minimizar los impactos de la obra.
Además, dado que la alcaidía será un lugar de detención transitoria a la espera del traslado definitivo, está contemplado que dicha dinámica impedirá por sí misma la ocupación de los terrenos circundantes con asentamientos de cualquier tipo.
Por todas estas razones, me he comprometido como intendente de Tigre a firmar el convenio con la Provincia sobre el Programa de Alcaidías, porque creo en seguir mejorando la seguridad de mis vecinas y vecinos, así como la integridad ambiental de su entorno.
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