El emprendimiento como generador de empleo juvenil

Por LUIS ARAYA CASTILLO / Director de Posgrado en la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello (Chile)

La pandemia del COVID-19 ha tenido un impacto negativo sobre los mercados laborales de América Latina, por cuanto los efectos de las medidas para enfrentar la pandemia, como el confinamiento, ha provocado la quiebra y el cierre de numerosas empresas locales, y con esto, que millones de personas hayan perdido sus empleos y sus fuentes de ingresos. Esta situación llevó a que se evidenciaran, con mayor claridad, las desigualdades existentes en los países latinoamericanos, lo que se ve reflejado en el aumento de la pobreza, debilidad en el crecimiento económico, dificultad en la generación de empleo asalariado, y otras desigualdades sociales.

Dado eso, se hicieron presente los grandes desafíos del trabajo en condiciones de informalidad, con bajos ingresos, sin protección social, ni acceso a la salud. Esto se presentó en un contexto de debilidad y vulnerabilidad macroeconómica, donde el COVID-19 afectó a la región a través de la disminución de la actividad económica de sus principales socios comerciales, la caída de los precios de los productos primarios, la interrupción de las cadenas globales de valor, la menor demanda de servicios de turismo, y la intensificación de la aversión al riesgo y el empeoramiento de las condiciones financieras mundiales.

El aprendizaje organizacional como herramienta de adaptación a entornos cambiantes

En este contexto, los países han implementado medidas para solucionar las carencias observadas en los sistemas de protección social y los regímenes de bienestar, comprendiendo que para salir de la crisis laboral es necesario repensar el modelo de desarrollo y consolidar las dimensiones económicas, sociales y ambientales de un progreso sostenible. Sin embargo, la persistencia del COVID-19 está retrasando la recuperación económica en prácticamente todos los países de la región, lo cual, en los últimos meses, se ha potenciado con algunas crisis políticas, sociales o conflictos de gobernabilidad.

Estas consecuencias laborales de la pandemia, que se han observado en la pérdida de ingresos y de trabajos, se presentan entre personas de todas las edades. No obstante, la población joven está entre los que más padecen las consecuencias sociales y económicas de la crisis sanitaria en la región, y harán frente a los efectos de esta en los próximos años de su vida laboral. Esto es relevante, pues las personas jóvenes representan a un grupo de la población fuertemente afectada por el desempleo, lo que intensifica su vulnerabilidad económica. El resultado es que la juventud se enfrenta a un progresivo déficit de oportunidades laborales y altos niveles de incertidumbre económica y social, de modo que, el empleo para las personas jóvenes se muestra como un desafío político, porque las expectativas traducidas en desaliento y frustración debilitan la estabilidad de las sociedades e incrementan las oportunidades de que se observen crisis sociales.

Ciudad: Quitarán la licencia de conducir a quienes den positivo en un test de alcoholemia

Para resolver esta problemática, los países deben estimular la economía y el empleo a través de incentivos fiscales, la creación de nuevos emprendimientos, la protección a los trabajadores y el apoyo a las empresas establecidas, los empleos y los ingresos. Es así como el estímulo al emprendimiento y a la creación de nuevas empresas, ha sido históricamente el principal contribuyente de nuevos empleos en Latinoamérica y en el mundo, por cuanto no sólo favorece el desarrollo social y económico de un territorio, sino que también el campo profesional de las personas.

El contexto actual requiere de nuevas condiciones para fomentar en los jóvenes el emprendimiento como vía principal para mejorar la empleabilidad y la movilidad social. Sin embargo, para que la creación de nuevos negocios sean factores potentes y dinamizadores de empleos, es necesario establecer diferencias entre el emprendimiento por necesidad y por oportunidad.

Proyectan una ciclovía por Libertador que una Retiro con General Paz

El emprendimiento, por necesidad o subsistencia, es aquel que surge por una necesidad puntual de la persona emprendedora, principalmente de tipo económico, tiene poca innovación, se asocia a personas de escolaridad baja, con pocas posibilidades de crecimiento y su impacto económico y social es bajo. En tanto que, el emprendimiento por oportunidad se asocia a la identificación de oportunidades de mercado, incorporan la innovación, son intensivos en conocimiento, se asocian a personas de mayor escolaridad y su impacto positivo en la sociedad es mayor.

Por las razones anteriores, y teniendo presente que el entorno competitivo es inestable y dinámico, entonces los jóvenes tienen que identificar nuevas oportunidades de mercado en la mejora de productos, como las ventajas de la sal light; mejora de procesos, por ejemplo usando códigos QR en los restaurantes; satisfacer necesidades de mejor manera, como las aplicaciones para transporte urbano; o de un deseo no satisfecho, como las aplicaciones para la compra en supermercados; y aprovechar recursos no utilizados, que se observa en la fabricación de vasos con botellas recicladas.