Mujeres y jóvenes, los más afectados por el desempleo en la Ciudad

Luego de meses de fuerte contracción económica, consecuencia de la pandemia mundial de COVID 19, todo indicaría que estamos ingresando a una etapa de recuperación del empleo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Según datos oficiales, la población ocupada en el segundo trimestre de 2021 es de 1.479.000 personas, unas 250.000 más que en el segundo trimestre de 2020.

No se puede negar que es una noticia esperanzadora, aunque debemos tener en cuenta que la comparación se está realizando con un trimestre que registró la tasa de desocupación más alta de los últimos cinco años, con el 14.7%. De hecho, más de 70.000 personas que perdieron su trabajo en la Ciudad durante la pandemia, aún no lo recuperaron.

Frente a estos datos, Marta Albamonte, ex ministra de Hacienda porteña y actual titular del Instituto de Políticas Públicas para Buenos Aires, se pregunta: ¿esta recuperación es igual para todos?. En una investigación realizó, muestra cifras que indican que las mujeres y los jóvenes se están llevando la peor parte. De las personas que buscan trabajo en la Ciudad y no lo encuentran, el 54,8% son mujeres.

Esta situación, sin embargo, no es novedosa. En el Índice de Bienestar Urbano, realizado por dicho Instituto, advertimos que en el período 2016-2019 la tasa de desocupación de las mujeres siempre fue mayor a la de los varones. Esto se agudizó en 2020, año en que, además, se registró una importante salida de mujeres de la fuerza laboral, como consecuencia de las mayores tareas de cuidado en los hogares. La dinámica del segundo trimestre de 2021 refleja que gran parte de ellas no recuperaron su empleo.

LOS JÓVENES CON GRANDES DIFICULTADES PARA CONSEGUIR TRABAJO

La población joven es otro de los grupos más golpeados por la pandemia y de los que encuentra mayores dificultades para su inserción laboral.

Según datos del Gobierno de la Ciudad, este colectivo registra una tasa de desempleo superior a la de la población adulta y con una tendencia creciente. De hecho, presenta un incremento promedio de 1 punto por año: 14.8% en 2017; 16.8% en 2018 y 16.3% en 2019.

Por otra parte, registran mayor cantidad de tiempo desempleados. Detentan una tasa de precariedad del 41.7% para la población joven asalariada.

UNA TENDENCIA QUE SE PROFUNDIZÓ CON LA PANDEMIA

“La crisis por la pandemia vino a profundizar una tendencia hacia la desocupación creciente. Ya se venía registrando hace años en la Ciudad. No sólo se asentaba en las comunas del sur porteño, que históricamente muestran indicadores socioeconómicos menos favorables, sino también en aquellas que suelen estar mejor posicionadas”, sostuvo Albamonte.

En 2019, las comunas más castigadas fueron la 8 (conformada por los barrios de Villa Soldati, Villa Riachuelo y Villa Lugano) y la 4 (La Boca, Barracas, Parque Patricios y Nueva Pompeya), que además repiten el mismo patrón respecto a la desocupación por género.

Pero también la tasa de desocupación ha sido creciente en los últimos años en comunas como la 2 (Recoleta), 13 (Núñez, Belgrano y Colegiales) y 14 (Palermo). Estas comunas, según datos del Instituto, siempre han evidenciado indicadores socio económicos más favorables, pero aun así, el nivel de empleo ha ido decreciendo.

“No tenemos dudas que la pandemia es uno de los problemas sanitarios que nos ha tocado atravesar en estos tiempos modernos. Tampoco hay dudas que tuvo y tiene aún su incidencia en la actividad económica. Sin embargo, hay que poner en claro que la cuestión del empleo en nuestra Ciudad viene siendo un problema creciente en los últimos años previos a la aparición del COVID 19. Sería importante inyectar recursos para reactivar las actividades que generan mayor empleo en la Ciudad poniendo en marcha de este modo el círculo virtuoso de la economía: producción, trabajo, consumo, mayor producción”, finalizó Marta Albamonte.