La realización del Paseo del Bajo permitió cambiar la movilidad en la zona del Bajo de la Ciudad de Buenos Aires por completo. Este corredor vial, anteriormente, era compartido por vehículos de carga, transporte público, autos particulares y motos. Demoraban más de una hora en recorrerlo. Desde su inauguración, los vehículos livianos circulan por las avenidas Huergo-Madero (sentido hacia el sur) y Alicia Moreau de Justo (sentido hacia el norte). Los pesados lo hacen por la traza exclusiva en trinchera/viaducto, con tiempos de viaje menores a 12 minutos en su recorrida completa.
Esta mega obra reconfiguró el Bajo porteño. Mejoró el tránsito vehicular y la logística del transporte de pasajeros y mercaderías. “Desde su apertura, los sensores de AUSA registraron 15.713.180 pasos de tránsito pesado y de micros de larga distancia”, nos contaron desde AUSA a SECCIÓN CIUDAD.
QUÉ ES EL FREE FLOW
El Paseo del Bajo es la primera autopista argentina con Free Flow, o sea peaje de flujo libre. Para la gestión del cobro, cuenta con un sistema inteligente sin barreras ni cabinas. El servicio de recaudación es automático. El vehículo es detectado a través de una infraestructura dedicada por carril de lectores láser, cámaras de lectura de patentes trasera y delantera y antenas de radiofrecuencia. De esta manera, al pasar por el pórtico de lectura, se identifican sus dimensiones con el fin de determinar su categoría y por lo tanto la tarifa correspondiente. Para aquellos usuarios registrados con una cuenta TelePASE, el cobro es enviado automáticamente a su medio de pago informado. Aquellos usuarios que no posean TelePASE deben realizar el pago correspondiente a su patente detectada en el portal de recaudación de la concesionaria.
CÓMO ES LA OBRA DEL PASEO DEL BAJO
Es un corredor vial que cuenta con 7,1 km. Tiene dos carriles por sentido exclusivo para tránsito pesado. Conecta, desde el sur, las autopistas 25 de mayo y Ricardo Balbín (Buenos Aires-La Plata) con la autopista Illia en el extremo norte; con accesos al Puerto de Buenos Aires y a la Terminal de Ómnibus de Retiro. Además, en la vialidad superficial se cuenta con cuatro carriles por sentido para el tránsito liviano.
Para poder hacer realidad esta obra, se excavó un millón de metros cúbicos. Esa tierra fue trasladada a la zona portuaria de Buenos Aires. Se instalaron plantas de hormigón que proveían única y exclusivamente a la obra en donde se utilizaron 200.000 m3 de hormigón y 54.000 toneladas de acero. Estos valores equivalen a la ejecución de 30 pasos bajo nivel en simultáneo.
EL PASEO DEL BAJO EN NÚMEROS
- Cuenta con 26 salidas de emergencia para el sector de la trinchera que permiten evacuar a los usuarios.
- Sistemas ITS con 240 cámaras (fijas, ojo de pez y domos)
- Sistema de cartelería inteligente -15 carteles a lo largo de toda a traza- para mantener al usuario informado en tiempo real
- Tres subestaciones eléctricas para abastecimiento propio
- Dos pozos de bombeo para captar el agua de lluvia de la trinchera
- Un sistema integral contra incendio: 1) Independiente del resto de la Ciudad con 46 bocas hidrantes en la trinchera, 14 bocas hidrantes en la superficie. 2) Paneles ignífugos en la trinchera. 3) Sumideros de captación de fluidos con sistema cortafuego, para evitar la propagación del mismo.
Debido a la conformación y uso de la traza, se reduce la emisión de gases. Los usuarios ahorran tiempo y viajan más cómodos y seguros.
FOTOGALERÍA DE LA OBRA
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